Estoy tendida en mi cama
recordando los usos que le ha dado
a cada uno de los agujeros
de esta perra...
No puedo evitar elevar el culo
de la manera
que a Usted le gusta
separo las piernas
y comienzo lentamente
a frotar mi pelvis a la cama
y la mente se pregunta...
Acaso mi culo no lo provoca?
acaso mi mirar no lo provoca?
acaso no me desea?...
En esta ocasión me siento
caliente
muy caliente
muy húmeda
tanto que al apretar mis piernas
puedo sentir
deslizar de la humedad
acariciando mi clítoris...
Mi Amo
puedo imaginar que abusa de mi?
mi Señor
puedo pensar en sus caricias?
mi Dueño
esta perra puede masturbarse
para Usted?...
Por favor mi Señor
deje rendirme a Sus pies
permitame entregarle
un concierto de gemidos...
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